Estas fotografías corresponden al proyecto «Niñas que tienen niños» y fueron tomadas por la nuevoyorquina, Linda Forsell. Esta fotoperiodista, pasó dos años en Guatemala fotografiando y conociendo la historia de madres menores de 15 años: en este país, 25% de los nacimientos corresponden a madres adolescentes y en 90% de los casos, fueron resultado de la violación por parte de un pariente. Además, en un 30% se trata de violaciones por parte del mismo padre de la niña o joven.
Si bien el proyecto fue exhibido durante todo 2015, lo reflotamos hoy para recordar todo el sufrimiento, violencia y daño físico y mental que hay detrás de un embarazo forzado a tan corta edad. Forsell retrató las complicaciones que muchas de las niñas sufrieron durante el parto -a las cuales están más expuestas-, la falta de apoyo terapéutico, el rechazo que muchas manifestaron hacia sus bebés por meses, el acoso al que fueron sometidas por sus agresores -buscando impedir la denuncia- y las bajas penas que recibieron tras ser denunciados.
¿Y cómo es la situación en Chile? En nuestro país, más de 10 mil menores de 15 años han sido madres en una década. Además, según cifras del Ministerio de Educación, un 50% de las niñas y jóvenes embarazadas no logra terminar el colegio. Esto se agrava en estratos socioeconómicos bajos. A ese escenario, se suma que los principales casos de abuso y agresión sexual se cometen contra niñas, al interior de sus hogares y por parte de un familiar.
Por eso, hacemos hincapié en que son #NiñasNoMadres, y en la importancia de la educación afectivo-sexual, como herramienta para prevenir el abuso y violaciones en la infancia. Un embarazo forzado a temprana edad es un grave problema de salud y de Derechos Humanos, que pone en riesgo la vida de miles de niñas y jóvenes.
Puedes revisar el proyecto completo de Linda Forsell en su web personal.